Tiene un color amarillo pajizo profundo.
El perfume persiste en elegantes tonos florales de jazmín y retama, complementados con agradables notas vegetales.
En boca es goloso y maduro, de gran finura.
Tras la vendimia manual a finales de agosto, el mosto fermenta mayoritariamente en depósitos de acero inoxidable y una parte en barrica. Los dos lotes permanecen en los mismos recipientes para continuar con la fase de afinamiento y, tras el ensamblaje, el vino reposa en botella otros 3 meses.